No es ningún secreto que el activo más valioso de una organización son sus datos. Pero el acceso a esos datos se determina en función de la identidad de un individuo (o entidad) dentro de esa organización. No importa si esas identidades son internas o externas a la organización o si son dispositivos de usuario o cosas. Garantizar que esos activos se gestionan y protegen adecuadamente requerirá una solución IGA.